jueves, 21 de marzo de 2013

Los Beneficios de la Siesta

Dormir una siesta puede ser una gran manera de ponerse al día con el sueño atrasado, aumentar la productividad y ser más creativos. La siesta deja al cuerpo en un estado relajado, contrarrestando los efectos del estrés diario.

Los estudios han demostrado que la costumbre de echarse una siestita puede realmente reducir el riesgo de morir de una enfermedad del corazón.
 
El sueño tiene cinco etapas. Si la siesta se extiende de la etapa 1 (sueño liviano) a la etapa 2 (actividad cerebral ralentiza), se despertará sintiéndose más energizada/o y alerta. En cambio, si la siesta se extiende a las etapas 3 y 4 ( sueño profundo), es difícil despertarse, además de que uno se siente atontada y cansada.
 
La primer etapa dura aproximadamente 10 minutos y la segunda dura otros 10 minutos. Esto hace que 20 minutos sea el tiempo ideal para una siesta aunque puede variar ligeramente; lo ideal es experimentar, para aprender lo que funciona mejor para una.
 

Algunos consejos para aprovechar mejor la siesta

Horario: El mejor horario para tomarse una siesta es entre la 1:00 p.m. y las 3:00 p.m., pues es cuando el nivel de energía decrece por el aumento de melatonina (hormona que regula el sueño) a esa hora. 
No muy tarde: Tomar una siesta dentro de las 3 horas previas a la hora de acostarse puede interferir con el sueño nocturno.
 
Buscar un lugar tranquilo: Asegurarse de no ser molestada/o durante la siesta.
 
Tiempo máximo: 30 minutos. Si se duerme más de 30 minutos, se corre el riesgo de entrar en un sueño profundo y luego, al despertarse, sentirse  cansado y aturdido.

Un cafecito y a dormir la siesta: Algunas personas dicen que si toman un café inmediatamente antes de dormir la siesta, se sienten mejor. La cafeína hace efecto entre los 10 y 20 minutos de consumida, despertándolos. La persona se siente muy energizada debido a la combinación de la siesta y la cafeína. Incluso algunas investigaciones realizadas en Japón, indican que las personas que toman una "siesta con cafeína" experimentan menos somnoliencia y mayor productividad que las que al despertarse de la siesta se lavan la cara o se ven expuestas a luces brillantes.

En fin, la costumbre de la siesta diaria mejora la calidad de vida, más aún si se tiene una jornada muy larga o desde muy temprano.
 
 
 











Fuente: mujeres de empresa

0 comentarios:

Publicar un comentario