2º noche de Corsos: Comparsas Mayores

Delfina, pasista de Comparsa Juventud

De las comparsas mayores, toda la expectativa estaba puesta en La Nueva Shangay, cuya participación este año, estuvo plagada de polémicas, renuncias de sus integrantes, denuncias entre dirigentes y comparseros y la promesa de su presidente que en la noche de ayer todo eso, quedaría en el olvido. Porque prometió que la comparsa brillaría de cabo a rabo en el corsódromo. 

Lamentablemente la promesa no se cumplió, nuevamente Shangay, dio un triste espectáculo ante la mirada atónita de su público ávido de lujo y color.

Sin embargo debemos rescatar, la buena predisposición de aquellos valientes pasistas que aún en condiciones paupérrimas de presentación, dieron lo mejor de sí para que la comparsa esté presente.

Soberana de La Nueva Shangay: Ana Paula I

Juventud, este año es la revelación del carnaval. Luego de veinte años de ausencia y no sin inconvenientes, salió a la palestra y se comió el corsódromo, el público, sabiendo de su historia la acompañó en todo el trayecto del desfile apoyando a las bailarinas/es con aplausos y ademanes de entusiasmo por el logro obtenido en tan poco tiempo.

Sus integrantes la rompieron, sobre todo la bastonera de escuela de zamba (  Yenifer Samudio  ) que contagió su fervor y alegría a la concurrencia que la aplaudió a rabiar.

Luego le tocó el turno a la multi-campeona Carun Berá quien desplego toda su belleza y algarabía para beneplácito de sus seguidores, que formaron grupos multitudinarios para hacer ver su pertenencia a las huestes de ésta famosa comparsa. Acompañando con banderas de todos los tamaños, espuma y cantando las estrofas de sus canciones hasta quedarse sin voz.

El despliegue de la misma fue excepcional, mucho mejor organizada que en la primera noche y con un gran trabajo de logística. Sus pasista pudieron lucir lo mejor de la comparsa a pesar del fuerte viento, un tanto atípico en las noches del verano correntino.

Cerró la noche o inició el día, la última campeona de los carnavales casereños;  Comparsa Orfeo y su Fábrica del  Carnaval. La majestuosidad de sus trajes sólo pudo ser opacada, por momentos, por la belleza de sus integrantes que denotaban gran pasión y entrega en cada paso de baile.

 Lujo, brillo y estética son sinónimos de ésta comparsa tradicional que año a año reafirma su condición de tal.

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